sábado, 9 de noviembre de 2013

Casa Emiliano, Femés, Lanzarote

El restaurante Casa Emiliano se encuentra en el pueblo de Femés, en la zona de Yaiza, al suroeste de la isla. Llegando por la carretera desde Playa Blanca, te lo encuentras de frente una vez que terminas de subir y comienza el pueblo de Femés. Tiene ademas un aparcamiento para clientes.

Como está en un alto, se puede ver toda la costa de la zona de Playa Blanca. Incluso si el día es claro, se puede ver la isla de Fuerteventura. Las vistas desde la terraza son muy bonitas, todo el valle y al fondo el mar.


Llegamos sobre las 14:00h y había un par de mesas libres en la terraza, el resto estaba
lleno. Tienen un jardincito con plantas autóctonas y la terraza es techada. La clientela, es su mayoría guiri, aunque también gente de la isla. Las camareras, parecía madre e hija, y eran canarias. De hecho nos chocó un poco que no hablaran inglés, en la mayoría de restaurantes de la isla lo hablan.

Para beber pedimos agua (1,10€) y una jarra grande de cerveza (0,5litros, 3,50€). La carta no tiene una gran variedad de platos, todo comida típica de la zona: papas arrugas, potaje canario, cabrito, conejo y varios pescados. No muy amplia, pero con suficiente variedad para satisfacer casi a cualquiera. Pedimos papas arrugas (3,25€), ensalada de la casa (4,10) y de segundos, conejo (10€) y mero al ajo (7,50€). 

En primer lugar nos trajeron el pan y los mojos, que no pueden faltar en una comida en Lanzarote. Como otras veces, mojo blanco, mojo rojo y mojo verde. El rojo fue el que más nos gustó, el blanco normalito y el verde bastante peor que en el Amanecer. Luego nos trajeron las papas, y muy ricas con el mojo. También la ensalada de la casa, con lechuga, tomate, pimiento, cebolla, aceitunas...


Cuando aún no habíamos terminado, llegaron los segundos. Eso no nos gusta nada, porque se te acumula la comida, casi no te cabe en la mesa, y encima se te enfrían las cosas. Pero bueno, como ya no nos quedaba mucho de los primeros, atacamos a los segundos. El conejo es una fuente bastante grande, con unos 10 trozos de conejo al ajillo. Además lleva papas fritas y ensalada. Nos gustó mucho, muy bien hecho, con sabor a ajo, pero ligero y muy fresco, además de una ración muy grande, yo creo que da para dos personas.
El mero lo mismo, muy fresco el pescado, mucha cantidad y acompañado de ensalada. También hecho al ajo, pero con sabor suave.

Nos cobraron 32,50, incluyendo 1,50€ del pan para dos personas. Nos parece una muy buena relación calidad de precio, porque son poco más de 15€ por persona, y comimos muy bien.

En definitiva, una buena opción para comer/cenar por la zona de Playa Blanca. Destacar las vistas del sitio, la calidad y cantidad de la comida, y la amabilidad de las camareras. Es un sitio con fácil acceso y dispone de zona para aparcar donde caben al menos 15 coches. Como punto negativo, el que te saquen toda la comida de golpe, aunque desconocemos si lo hacen habitualmente.

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