A todo México, Madrid

El restaurante mejicano A todo México se encuentra en la calle San Bernardino 4 de Madrid, muy cerca de la Plaza de España. Los fines de semana hay bastante afluencia al local, por lo que no es mala idea reservar, bien por email info@atodomexico.es o bien por teléfono 915 419 359. Abre de lunes a domingo de 13:00 a 16:00 y de 20:00 a 0:00.

Nos acercamos a este restaurante un viernes por la noche, sobre las 23:00h. El local tiene una fachada muy estrecha, pero luego dentro es bastante grande. No tiene terraza, y coge cheques de comida de diversos tipos, entre ellos Cheque Gourmet y Sodex Pass. Es uno de los restaurantes mexicanos más clásicos de Madrid, llevan alrededor de 40 años funcionando.


Cuando entramos el local estaba con solamente 7 mesas ocupadas, por lo que enseguida nos sentaron en una mesa cerca de la barra que tiene el local. La decoración del local es de la típica casa de comidas mexicana, con cuadros de pueblos de México y bastante sobria. Es grande, y las mesas no están demasiado cerca unas de otras, lo cual siempre se agradece.

Enseguida nos atendió un camarero muy amable, y le pedimos cerveza y agua para beber. Nos trajeron un aperitivo consistente en nachos (pero auténticos, no como los de matutano) con dos salsas, ambas picantes, aunque no mucho.


La carta es bastante amplia, e incluye prácticamente todos los platos de la comida mexicana más típicos: burritos, enchiladas, tacos, nachos, guacamole, frijoles, fajitas, jalapeños.
Nos decidimos por un plato deluxe (20€ + iva) que incluye un poco de todo, para compartir. Enseguida nos sacaron el primer plato, que es un combinado con nachos, guacamole y un jalapeño relleno. El guacamole bastante solido y muy rico de sabor, los nachos también, y el jalapelo es un pimiento picante, pero picante de verdad.

A continuación nos llegaron los segundos: dos enchiladas con carne, queso fundido y chile, un taco de carne de ternera, un plato con arroz mejicano, otro con frijoles refritos y tortillas. Nos gusto todo mucho, porque todos los platos tienen un gran sabor, aunque no resultan especialmente picantes, ni tampoco difíciles de digerir. Si te gustan los platos muy picantes, la carta los contiene, con lo que tampoco hay mucho problema.

Con el menú, una cerveza, agua y un té, pagamos 27,54 que no esta mal, porque no sales con hambre, y la comida esta buena. Además te ponen un jarra de agua, si no quieres pagar por la mineral.

En conclusión, un restaurante muy recomendable para degustar la comida mejicana, con una buena relación calidad precio. Volveremos.