De Monte de Tabuyo, Tabuyo, León.

En el pequeño pueblo de Tabuyo del Monte, en la provincia de León, se encuentra el restaurante "El comedor del monte". La página web del restaurante, que también tiene tienda es esta y la dirección y teléfono son las siguientes:

C/ El Pinar s/n
24721 Tabuyo del Monte (León) ·
Tfno/Fax: 987 60 08 21 · 
En cualquier caso el pueblo es pequeño, por lo que no resulta difícil encontrar el restaurante.

El restaurante está casi a las afueras del pueblo, rodeado de alguna casas y de campo. Se trata de un edificio de dos plantas, con la fachada amarilla y la puerta de piedra. Cuando entras, tiene un pequeño recibidor y ya pasas directamente al salón. Nada más entrar nos preguntaron si teníamos reserva y nos sentaron en la planta de arriba, al lado de la ventana. El restaurante es acogedor, está decorado con muy buen gusto y es muy elegante, en ese mezcla de rural manteniendo la esencia, pero a la vez, con un toque de actualidad.

En seguida nos trajeron la carta, y echamos un vistazo. Tienen un menú del día, el menú buscasetas y luego una carta con solamente 5 platos, todos relacionados con las setas. El menú del día es de dos platos y postre y cuesta 15€ (entre los primeros había arroz con setas, esparragos con mahonesa, crema de calabacín,... y entre los segundos pollo de corral, carrillera al prieto picudo,...) , el buscasetas 25€ y los platos de carta entre los 8 y los 15€. Yo me decidí por el buscasetas y mi acompañante por menú del día. De primero se pidió crema de calabacín al aceite de boletus y de segundo judiones de la Valduerna con setas. Para beber, vino de la casa (un prieto picudo bastante correcto) y agua.

Enseguida nos trajeron la bebida y un caldo de setas. Nos gustó mucho el sabor y además nos sentó muy bien, porque era un día frío y nos hizo entrar en calor enseguida. En unos 10 minutos más o menos, llegó la crema de calabacín y mi primero: el petix-choux de boletus y la quiche de pleurotus y bonito. Las dos cosas muy ricas, excelente el petit-choux con mucho sabor a boletus. La quiche muy jugosa y ligera.
La crema de calabacín también le gustó a mi acompañante

A continuación me trajeron el segundo plato del menú buscasetas, que incluye lengua de vaca curada con mousse de boletus y frutos secos, judiones de la Valduerna con setas y boletus a la sartén con foie y huevo de codorniz. Los judiones exquisitos, ya los había probado en otra ocasión, igual que los boletus con huevo y foei. Y me soprendió mucho la lengua con mousse de boletus, la anterior vez no la tenían en el menú y estaba realmente bueno, es una buena combinación con el mousse de boletus y los frutos secos.

Cuando lo terminé, ya casi estaba lleno, pero aún me quedaban dos platos más, y el postre... Nos recogieron los platos y nos trajeron los judiones con setas y el parmentier de bacalao y setas de temporada. Los judiones muy buenos, ya lo habíamos comentado antes y el parmentier tampoco estaba mal, pero el bacalao un poco salado. Las setas muy buenas, y también la crema con la que iba ligado, pero dejé un poco de bacalao.









Los judiones engañan, porque el plato parece pequeño, pero es una ración considerable.

Y ya para terminar con los platos, me trajeron el ragout de toro con shitake, que estaba muy bueno, muy jugoso y con mucho sabor, pero la verdad es que ya estaba muy lleno, y casi no me entraba nada mas. Aún así, me lo comí casi todo. Tampoco es un plato muy grande, pero cuando llevas todo lo anterior en el estómago, cuesta terminarlo.






Para terminar nos trajeron los postres: el crepe de crema pastelera con setas caramelizadas y coulis de frambuesa al cacao y un flan de queso con pera. Los dos buenísimos, apenas nos dió tiempo a hacer la foto antes de hincarles el diente, solo se lo hicimos al crepe.

Después nos trajeron café y un chupito de licor de frambuesa, hecho con frambuesas de la zona que estaba también para repetir. 

Pedimos la cuenta que ascendió a 40€ y bajamos a la caja a pagar, donde aprovechamos para comprar algunos de los productos de elaboración propia que venden, como los judiones con boletus, el paté de boletus o un vinagre de frambuesa.

Es un restaurante que recomendamos, la comida está muy rica y es de buena calidad, tienen variedad suficiente para ir de vez en cuando y las mujeres que lo llevan son muy amables. El entorno es muy tranquilo y el restaurante es bonito y está muy limpio. Seguro que volveremos!!!