Casa Emiliano, Femés, Lanzarote

El restaurante Casa Emiliano se encuentra en el pueblo de Femés, en la zona de Yaiza, al suroeste de la isla. Llegando por la carretera desde Playa Blanca, te lo encuentras de frente una vez que terminas de subir y comienza el pueblo de Femés. Tiene ademas un aparcamiento para clientes.

Como está en un alto, se puede ver toda la costa de la zona de Playa Blanca. Incluso si el día es claro, se puede ver la isla de Fuerteventura. Las vistas desde la terraza son muy bonitas, todo el valle y al fondo el mar.

Restaurante Amanecer, Arrieta, Lanzarote

El lanzaroteño pueblo de Arrieta, es uno de los mejores sitios de toda la isla para disfrutar de la cocina local. Se trata de un pueblo costero, muy cerca de los Jameos del Agua y de la Cueva de los verdes, por lo que es buena idea acercarse a este pueblo antes o después de la visita turística, y probar las especialidades de la cocina lanzaroteña.

El restaurante se encuentra en la calle de la Garita, en una zona donde hay varios. Es de los restaurantes de toda la vida, donde no se puede reservar. Cuando llegas, pides mesas, y te dicen más o menos cuanto te toca esperar, y te tienes que quedar por allí para que te avisen. Para esperar tienen una zona pequeña de bar, donde se puede tomar algo.

Restaurante asiático Sol, Leganés

En Leganés hay un montón de restaurantes chinos, pero si te apetece comer comida japonesa, lo tienes más difícil. De hecho, y hasta donde nosotros sabemos, el restaurante Sol de Leganés Norte (Avenida Reina Sofía 28, teléfono 91 496 03 17) es la única opción. Y no se trata de un restaurante japones al uso, sino de un restaurante chino, donde además se pueden degustar platos de la comida thailandesa y algunos japoneses, básicamente shusi.

Nos acercamos un domingo por la noche, durante el verano, sobre las 22:00h y el restaurante estaba vacío. La decoración es muy parecida a la de cualquier otro chino: paredes de madera decoradas con abanicos y otros motivos asiáticos, plantas, una pecera y mesas con manteles muy blancos y sillas negras. Al fondo tienen una barra de bar y al lado la cocina.

Pata Negra, Zamora

En el número 4 de la calle Pelayo de Zamora ha abierto hace poco el restaurante Pata Negra. Está en una zona peatonal, muy cerca de la plaza del Maestro y de la calle Santa Clara, en el centro de la ciudad. 

Estábamos tapeando dentro del concurso de Tapas y llegamos a este bar para preguntar. El pincho con el que participaban era "la bella y la bestia" y decidimos entrar a preguntar de que se trataba. En cuanto una de las camareras nos lo explico muy amablemente, decidimos quedarnos a probarlo: un nido de buey con lluvia de foie regado con jugo de olivo virgen trufado y diamantes de sal, acompañado de una "sorpresa (una crema de yogur con fresa, frambuesa y menta). Nos gustó tanto, que decidimos ir esa misma noche a cenar. Desde luego lo votamos como la mejor tapa, porque estaba muy rica. Y eso que la competencia fue dura, porque hubo mucha variedad y calidad en el concurso.

El Cau de Pedra, Elche

El Cau de Pedra es un restaurante argentino que se encuentra en el centro de Elche, en la calle Mare de Deu dels Desamparats, 8. Se trata de una zona peatonal muy tranquila, llena de restaurantes, bares y heladerías.

Estábamos buscando sitio para cenar sentados, porque ya habíamos comido de tapeo. Pasamos por delante de la puerta, y como era pronto (21:30h más o menos), no había apenas gente. Echamos un vistazo a la carta que tienen fuera y vimos que tenían un poco de todo, así que nos decidimos a entrar.

SushiOlé, Pozuelo

El restaurante SushiOlé está situado en la calle Atenas 2 de Pozuelo. Se encuentra en la zona residencial aledaña a la Avenida Europa, una de las calles principales. En lo que antes era una zona de copas, ha florecido ahora una zona gastronómica, con multitud de restaurantes de los más diversos tipos.

Cogimos la oferta que tienen en su web de 40% de descuento en la carta, que obliga a consumir cuatro platos, de los cuales al menos dos, tienen que ser segundos. Aunque la verdad es que en un restaurante como este, con platos de sushi, no se sabe muy bien cuales son los primeros, y cuales los segundos, y tampoco importa mucho.

Reservamos para las 22:30h y nos llamaron para decirnos que a esa hora solo tenían sitio en las mesas altas, las que tienen una banqueta. Lo cambiamos para las 21:30, porque esas mesas no son muy cómodas. Llegamos un poco más tarde de lo previsto, pero nuestra mesa estaba libre, así que nada más llegar, nos sentamos.

Ganaché, Elche

El restaurante Ganaché se encuentra en el centro de Elche, muy cerca del teatro. En concreto, en la plaza de la Constitución 3. Es una pequeña y tranquila plaza, y el local está en una esquina. Fuera tiene una pequeña terraza y la decoración del local es moderna, con las paredes pintadas de naranja y negro decoradas con pizarras y algún cuadro de Nueva York, sillas altas en la barra, y mesas al lado de las ventanas. En la parte derecha tiene el comedor para cenas más formales.

Escuela de hostelería y turismo Simone Ortega

La escuela de Hostelería y Turismo Simone Ortega ofrece la posibilidad de probar los platos que preparan sus alumnos/as. Se puede ir a comer cualquier día entre semana, y a cenar los miércoles, jueves y viernes. Para ello hay que llama por teléfono y hacer la reserva. Si se quiere ir un viernes, hay que reservar con bastante antelación, al menos tres semanas. Para el resto de días no hay tantos problemas. Los datos de ubicación y contacto los tienen disponibles en su web http://www.ehtsimoneortega.com/ Reservamos mesa para 6 personas un viernes, y nos presentamos allí sobre las 20:30h. La hora para la cena es demasiado temprana para la costumbre española, porque cuando cenamos fuera, solemos hacerlo entorno a las 22:00h. Pero hay que tener en cuenta que el trabajo lo realizan estudiantes, que terminan su jornada a las 22:15h... y si las cenas empezaran a las 22:00h, acabarían saliendo alrededor de las 12:00 o 1:00h de la mañana. 

Tapas Free, Carabanchel

En el madrileño barrio de Carabanchel, muy cerca de la carretera de Toledo, A42, se encuentra el restaurante Tapas Free. En concreto se encuentra en la calle Alejandro Sánchez 60, entre General Ricardos y Antonio Leyva. Es una zona bastante complicada para aparcar, y no se trata de una zona de tapeo tampoco. Hay algunos típicos bares de barrio en los alrededores, pero es una zona tranquila.

Llegamos sobre las 21:30 horas de un sábado, y había bastante gente. Nada mas entrar, esta la zona de bar, que tiene la barra a la izquierda y a la derecha mesas pequeñas con sillas altas. Estaban todas ocupadas menos una al lado de la puerta. 

Mas adelante tienen un biombo y ahí empieza las mesas del restaurante. Aunque no teníamos reserva, como solo eramos dos personas enseguida nos sentaron y nos trajeron la carta. La decoración del restaurante es bastante moderna, minimalista, las paredes pintadas en negro y rojo y en la parte superior dibujos de algunos de los monumentos y lugares más emblemáticos de la ciudad, como la Puerta de Alcalá o las torres Kio.

Il Tempietto, CC Tres Aguas.

Es verdad, que no somos amig@s de los centros comerciales. Pero también es verdad que hoy en día en Madrid si quieres ir al cine, pocas opciones tienes que no pasen por ir a un centro comercial. Los cines han ido desapareciendo poco a poco de los centros de las ciudades y pueblos, y ya son pocos los que resisten. Así que, un viernes que queríamos ir al cine, nos decidimos por entrar a cenar antes a este restaurante, Il Tempietto.

Se trata de una cadena de restaurantes, de franquicias. En Madrid en concreto hay 8, casi todos en centros comerciales. Es un restaurante de comida italiana, que no destaca ni por su decoración, ni por su fachada.

Wagaboo Parquesur, 2ª Visita

Como la primera visita nos convenció, una noche de sábado que volvíamos del cine, decidimos cenar una segunda noche en Wagaboo, para probar alguno más de los platos que nos habían parecido interesantes la primera visita.

Nada más llegar, dimos nuestro nombre para confirmar la reserva, e inmediatamente nos sentaron. Una buen idea reservar, sobre todo los fines de semana. Sin reserva, nos hubiera tocado esperar al menos media hora, porque aunque el restaurante es grande, estaba prácticamente lleno.